martes, 6 de febrero de 2007

Oyster Farmer (Anna Reeves/2004)


Oyster Farmer (Australia, 2004)Escrita y Dirigida por: Anna Reeves
Reparto: (Jack Flange), Jack Thompson, David Field (Brownie), Kerry Armstrong (Trish), Diana Glenn (Pearl), Claudia Harrison (Nikki Flange), Jim Norton (Mumbles)
Productores: Anthony Buckley A.M., Piers Tempest,
Escrita por: Anna Reeves
Música: Stephen Warbeck


El hecho que se haya escogido un lugar que pareciera remoto, salvaje y hermoso, pero sobre todo, donde nada extraordinario pudiese ocurrir es uno de los atractivos que tiene esta película. Anna Reeves, autora y guionista, comparte con nosotros las cosas que la mantienen enamorada de su Australia natal, ese sentido del humor estrafalario, sus mujeres fuertes y sensuales y sus paradisíacos parajes.

Un Parque Nacional rodeado por el Rio Hawkesbury, lugar ubicado tan sólo a una hora de la ciudad de Sydney, en el Estado de New South Whales, Australia, es el hermoso escenario donde se desarrolla esta película.

Oyster Farmer, nos muestra la historia de Jack Flange (Alex O'Lachlan), un joven avezado, con un pasado misterioso, y una hermana a cuestas, por quien asalta un mercado de pescadores y envía el dinero robado a una casilla postal a su nombre, en el pueblo de criadores de ostras donde ha decido quedarse por un corto tiempo.

La policía ha iniciado las investigaciones del robo, el tiempo apremia, y la entrega del paquete esperado se ve frustrada cuando por accidente, la correspondencia cae al río. Los días pasan y Jack empieza a sospechar que Pearl (Diana Glenn), la hermosa joven, por quien se sentirá terriblemente atraído, es quien se ha quedado con su paquete.

Granjero de Ostras, selección oficial en el Festival de Toronto, es una parte de la Australia de Reeves, pero es también es una tierra de hombres. El pueblo de Oyster Farmer está habitado por pequeñas comunidades de granjeros de ostras, excéntricos de mediana edad, de diversa índole, ermitaños inadaptados, que quizás eligieron ese lugar para huir de la ley, o para hacer una vida alejados de un mundo que los rechazó.

Sin embargo, al hablar de hombres, Anna Reeves nos habla de mujeres, de mujeres fuertes, y no por ello menos femeninas, con capacidad de adaptación, pero sobre todo, de mujeres que no están compitiendo por igualdad de género, sino por reconocimiento, por ser amadas tal y como ellas son, y no como los demás quieren que sean.

Trish (Ferry Armstrong) es la esposa insurrecta de Brownie (David Field), un hombre tosco, terco y egoísta que ha contratado a Jack para que lo ayude con el trabajo de su granja de ostras. De esa forma, Jack conocerá a Pearl, una joven cuya excentricidad femenina consiste en comprar zapatos por correspondencia y que ha tenido que aprender a vivir con dignidad frente a su condición de hija de un indeseable.

El Padre de Brownie, el viejo Muebles (Jim Norton), es el patriarca de un grupo de camaradas y veteranos de Vietnam, un viejo tremendamente parlanchín de origen irlandés, que hace lo mejor posible por ayudar a su hijo, quien no sólo está al borde de la banca rota en el negocio de criar ostras, sino que lleva varios meses separado de Trish, quien además de haberlo dejado, se ha empleado con un criador de ostras rival, cosa impensable en el pueblo, donde el lugar de una mujer está en la casa.

De acuerdo con Mumbles, su nuera, como toda mujer, es una “manipuladora emocional” de la peor especie, eso sí, un “gran tire”, lo que conforma una combinación desastrosa, sin añadir que está loca pues como condición para una posible reconciliación, Trish ha exigido una estúpida tina de baño, prometida por Brownie como regalo de bodas, pero que jamás recibió. Para el viejo Mumbles, una tina de baño está fuera de discusión por considerarlo excéntrico, superfluo y sobre todo, fuera del presupuesto de su hijo. “¿No es lo mismo mojarse de pie acaso?”

Sin lugar a dudas, el sentido del humor es uno de los ingredientes principales en esta película, y valiéndose de este elemento Reeves nos muestra que no sólo las mujeres luchan en ese lugar, sino también los hombres. Aunque su lucha principal es con ellos mismos, por mantener sus sentimientos bajo control.

Brownie está a punto de reventar de las ganas de volver con Trish, sin embargo, cuando descubre que el secreto de su éxito con las ostras, es que ella les canta, no hace más que ridiculizarla por sus dotes de mala cantante. Brownie no tolera el reconocer que su esposa califica en un asunto en el que él no debería necesitar de nadie, y menos de una mujer.

Sin embargo, en el pueblo, todos parecen tener no sólo una definición idónea para el amor, sobre todo Mumbles, que opina que es “como orinar contra una cerca eléctrica”, sino también el consejo perfecto para complacer a las mujeres y sus caprichos, como cuando accidentalmente el perro de Pearl muere y Mumbles le aconseja a Jack, que le compre otro nuevo, a modo de ejercer un poco de “control sobre el daño” ocasionado, así para cuando Pearl descubra la verdad, ya haya olvidado totalmente la ausencia de su perro. Algo así como cuando le preguntamos a cualquier persona sobre qué regalarle a nuestra pareja, o como hacer para conquistarlo. ¿Qué pueden saber los demás? ¿No sería más práctico preguntarle a nuestra pareja qué es lo que le gusta o disgusta?

Los deseos de los personajes de esta película no son imposibles de realizar, como no lo son la mayoría de nuestros sueños. Brownie no sólo desea que sus ostras crezcan, sino que también desea que su esposa vuelva a su lado, pero no es capaz de pedírselo. Jack desea dinero para poder costear el tratamiento de recuperación de su hermana Nikky. Nikky desearía que su hermano no la hiciera sentir como una carga, y como sí sólo él fuese el de las responsabilidades. Pearl desea ser un hombre, pero para poder saber qué es lo que Jack está pensando, o qué es lo que desea verdaderamente, y así poder complacerlo, y lograr conquistarlo, y así al enamorarse de ella, se quede. Y Trish, quiere su tina.

Pero, ¿qué de especial tiene esa tina para Trish? ¿Se trata únicamente del capricho de una histérica manipuladora? ¿Qué puede ofrecer una tina, en medio de un hermoso lugar donde lo que más abunda es el agua?

Me gusta pensar que la tina en sí, no es más que su valor simbólico, misterioso. Tal vez podría ser la promesa hecha por la persona a la que más amábamos, con la que quisimos compartir ese resto de nuestra vida, aún en el lugar más recóndito si era necesario y en condiciones no muy cómodas. Sin embargo, nuestros sentimientos proyectaron en esa persona, nuestras más altas expectativas, casi como si no se tratase del ser humano al que amábamos, sino a la proyección de un “súper hombre”, a quien, al cabo de un tiempo, por alguna razón que no podemos precisar, terminamos descubriendo que no necesitamos más, al menos, no de la manera que creímos inicialmente, por que hemos dejado de ser la mujer carga o la mujer necesitada, y nos hemos convertido en una compañera que reclama su 50% de participación en la gesta.

También me gusta pensar que muchas mujeres empezamos siendo como Pearl, necesitando de ese súper hombre, al cual quisiéramos parecernos, pues no nos hemos dado cuenta que no necesitamos ser rescatadas, sino mas bien ser compañeras de gesta. Pearl desea “ser hombre”, no sólo para proyectar una imagen de fortaleza, sino para poder saber si está o no en los pensamientos del hombre del cual se está enamorando, y par el cual ella es únicamente una estación de pasada a una aventura mejor y más prometedora. La Trish de Reeves ha reconquistado su seguridad, sin por ello haber perdido su capacidad de amar, y sobre todo su derecho a exigir ser compañera.

Oyster Farmer no es sólo una película de deseos truncos, de luchas, o de amor, sino también una historia que nos abre a la posibilidad de reaprender la alegría existente en las pequeñas cosas, en aquellas que no son tan extraordinarias, ni están necesariamente en lugares extraordinarios, sino en nuestro corazón.
PAOLA FATTORINI.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, te has equivocado, el protagonista se llama Alex O´Loughin

Anónimo dijo...

En aquel entonces se llamaba Alex O'Lachlan

Clau dijo...

O'Lachlan es el verdadero apellido de Alex.